DREAMS

Una noche, hace dos años, antes de acostarme, justo cuando iba a cerrar los ojos por que estaba tan cansada que los párpados pesaban como si fueran de acero, el miedo se durmió conmigo y adquirió forma de palabra.
No soportaba escribirlas, solo pensarlo paralizaba mis manos. Aterrada intenté pronunciarlas y aunque me costó, conseguí hacerlo. Luego probé a leerlas y me resultó fácil acunarme en su regazo.
Encontré historias de amor y odio, de miedo y osadía, de hijas y madres, de muerte y de vida.
Ahora en la lejanía del paso de los días se que solo me quedé suspendida un instante.